Ayuna Velo

Ayuna Velo es una emulsión aterciopelada que protege la piel frente a agresiones externas: radiación solar, contaminación, daño oxidativo, deshidratación, sequedad y alteraciones de la microbiota. Es como un velo cosmético con SPF 30 y filtros minerales que protege la piel de la radiación solar (UVA, UVB, infrarroja y visible) y va más allá todavía: protege el suprastratum, una desconocida capa superficial que juega un papel importantísimo en el aspecto y salud de la piel.

Está enriquecida con vitamina E y aceite de argán, potentes antioxidantes que protegen la piel de los radicales libres y mantienen la hidratación. El extracto de malvavisco forma un film que evita la adhesión de partículas contaminantes. Incorpora fortalecedores lipídicos que combaten los contrastes térmicos, así como derivados probióticos que previenen la proliferación de bacterias oportunistas, disminuyendo así la sensibilidad de la piel.

¿Por qué nos gusta tanto? Podríamos asegurar que es de lo mejor que hemos probado de todo el mundo cosmético. Es una crema multitarea y todo lo que hace lo hace fenomenal: hidrata, protege, unifica, embellece e ilumina. Su textura es rica y cremosa y al aplicarla queda como un velo dejando la piel suave y aterciopelada. Es resistente al agua, al sudor y no deja sensación grasa.

¿Para quién la recomendamos? Para todas los tipos de piel. En pieles muy secas, aplicar siempre después del sérum o crema. En pieles mixtas o grasas se puede aplicar como paso único después de la limpieza.

¿Cómo se aplica Velo de Ayuna? Utilízalo todos los días por la mañana sobre la piel limpia y seca. Si utilizas sérum, aceite o crema, aplícate Velo a continuación. Dispensa el producto a lo largo de los dedos, actívalo masajeando el producto entre las manos y distribuye con la yema de los dedos sobre rostro, cuello y escote.